Aventuras y experiencias


¿Cómo estamos transeúntes? 

Muchos de vosotros nos habéis preguntado por anécdotas o cosas impactantes del otro lado del mundo y en especial en relación a los niños, así que aquí viene una dosis de humor, realidad y aventuras.

No sé muy bien por cual de todas empezar... pero allá van...


Podría contaros que durante la época de lluvias en Pucallpa, justo al finalizar el voluntariado con los niños... ocurrieron cosas muy entretenidas

A mi no me quedaba un milímetro de mi piel sin un picotazo de mosquito.

Carlos se acababa de intoxicar por comer un tamal en un puesto callejero.

Y...desaparecieron unas cuantas carreteras, los ríos literalmente se tragaron los puentes, lo cual nos obligó a salir de allí casi a nado.
Carlos y yo decidimos que lo más seguro sería viajar en lancha dadas las condiciones (tampoco excesivamente seguro, unos días antes una lancha como esta se hundió, cerca de Iquitos, aquí os dejo las imágenes  https://www.youtube.com/watch?v=40SvOYA3PUk )
Finalmente fuimos al puerto y desde ese día en adelante...vivimos cuatro días junto con 250 personas más en unos ¿70m^2?  con un tití, tortugas, gallinas y pollos (era una especie de sala gigante, abarrotada de hamacas unas contra otras y la cubierta exterior)



Sin duda fue toda una experiencia y en el fondo no viajamos tan mal, logramos agenciarnos de un colchón para dormir que era parte de la mercancía que el barco transportaba.
Nos entreteníamos jugando con los niños, haciendo ejercicio, viendo las bandadas de pihuichus, buscando delfines de río (Vimos varios!!) y cantando (o intentandolo claro...)

En el computo total, nos quedó una experiencia inolvidable pero que con vivirla una vez es más que suficiente.


Otros pequeños detalles de este viaje: durante cuatro días solo comíamos arroz, solo había seis baños y seis duchas y funcionaban con el agua del río Ucayali ( no agua cristalina vaya... sino llena de sedimentos así que ducharse era maravilloso, tenias tratamiento de arcillas gratuito )









Puedes encontrarte bichitos del tamaño de tu cabeza casi en cualquier lugar y seamos realistas, nos encantan los animales, pero encontrarte tarántulas, serpientes y alacranes en sitios como tus zapatos o la cocina no era muy agradable

También mencionar que durante un mes una ranita del genero Dendropsophus vivió en mi retrete y saltaba fuera todas las mañanas dando los buenos días...entraba por la tubería y todos los días tenía que sacarla varias veces, esto era ligeramente complicado debido a su género....resbaladiza y con discos adhesivos en sus deditos




























Aunque esta anécdota, también tiene que ver con los "bichitos" merece contarla aparte...

Al salir de la selva resulto salirme una especie de sarpullido, abultado bastante molesto en la pierna , por lo que procuré no tocarlo.

Con el paso de los días fue pasando de sarpullido a infección y resultó ser la larva muerta de un bichito super simpático que al picar, dejo como regalito metido en la piel de mi pierna a su bebé.

Tiempo después he logrado conseguir larvas en mejor estado que la que me parasitó a mi y las mantengo en mi colección de bichos raros metido en alcohol, si lo sé es terriblemente asqueroso, pero... ¡¡¡Todo por la ciencia!!!





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